Que los jóvenes somos de uno de los grupos más jodidos es algo que Bea y Julio estamos siempre comentando en esta, nuestra comunidad newsletter. Con el panorama que tenemos, la promesa de un curro estable de lo nuestro es la zanahoria con la que aguantamos nuestro palo. Y claro, esa es la vulnerabilidad que aprovechan algunas empresas para cubrir puestos de trabajo a bajo coste. Hablemos del becariado, o de cómo hacer caja a costa de trabajadores cualificados no pagados (o infrapagados, en el mejor de los casos).
Se los llevó el tiburón
Los índices de precariedad juvenil dan miedo. Según el informe Foessa de este año, los jóvenes son el grupo más vulnerable del país: una de cada cuatro (28%) personas entre 16 y 34 años se encuentra en situación de exclusión social. Por otro lado, la tasa de paro entre los menores de 35 años es del 17,5% mientras que la media nacional se encuentra en el 13,7%, según datos de la EPA a cierre de 2021.
Solo uno de cada tres jóvenes entre 16 y 29 años vive en una casa de su propiedad, según la Encuesta de Condiciones de Vida del INE, frente a la media nacional, que es del 76%. Según este mismo estudio, la tasa de riesgo de pobreza era del 29% entre los menores de 16 años y del 24% entre quienes tienen de 16 a 29 años. Otra vez el promedio nacional es mucho más bajo: el 19%.
Lo que reflejan estos datos es un problema que, junto a la falta de respuesta y soluciones desde la política, nos deja muy expuestos frente a los tiburones en busca de presas frescas los jefes con pocas ganas (o posibilidad) de gastar presupuesto, pero con mucho trabajo que sacar adelante.
Ai se eu te exploto
Vivir en precariedad y verse obligado a encadenar situaciones laborales pésimas va de la mano. Si vas a enfrentarte a tus primeras prácticas, creemos que esto te ayudará a entender mejor en qué situación te encuentras. Y si ya las hiciste en el pasado, al menos comprenderás mejor cómo la empresa se aprovechó de ti.
Lo primero que hay que entender es que no es lo mismo ser un becario que tener un contrato en prácticas. De lo segundo hablamos otro día. Hay toda una maraña de palabros que definen a las diferentes relaciones laborales, como todo lo que tiene que ver con la puñetera burocracia y su lenguaje endemoniado. Cuando hablamos de un becario nos referimos a una persona cuya situación se regula mediante un convenio de prácticas entre una empresa y la universidad o instituto. Algunas son obligatorias porque corresponden a una asignatura de la carrera o FP y otras son optativas.
Bueno, al menos tengo derechos, ¿verdad? Nope, un convenio de prácticas NO es un contrato y, por tanto, no es una relación laboral. No tienes derecho a huelga, no estás amparado por el convenio y no cotizas para el desempleo (por tanto, no tienes derecho a cobrar el paro). En resumen, que un becario no es un trabajador a ojos de la ley.
Tus derechos como becario son ser tutelado por un profesional de la empresa en la que realizas las prácticas y por un profesor de la universidad, que tus prácticas sean evaluadas y obtengas un informe por parte de la empresa sobre tu desempeño, que te proporcionen formación en riesgos laborales y, si resulta que inventas/creas algo, tienes derecho a la propiedad industrial e intelectual, por supuesto.
Suavemente, pá-ga-me, que quiero independizarme de una p*** vez
¿Y a cobrar? ¿Tienes derecho? En las curriculares, nada de nada. Te servirán para sacarte los créditos correspondientes, aunque sí es cierto que algunas empresas compensan con una pequeña cantidad, totalmente voluntaria. En las extracurriculares, derecho como tal a cobrar no tienes, pero normalmente se retribuye con una cantidad “simbólica” (eufemismo de “cacahuetes”).
Algunas empresas sobreviven a base de becarios contando con ellos como si fueran trabajadores a media jornada (o incluso completa), pero pagando muchísimo menos por ellos, porque, además del tema del dinero que llega al bolsillo del becario, las cotizaciones a la Seguridad Social están bonificadas al 100%.
¿Vale la pena hacer prácticas no remuneradas? Podría decirse que, si realmente te van a formar, no vas a sustituir el puesto de un trabajador y lo que vas a aprender te va a servir en el futuro, es algo a plantearse. Pero esa decisión puede perjudicar tu sueldo en el futuro, según un estudio de la Universidad de Essex (Reino Unido). De todos modos, planteémonos quién se puede permitir realizar prácticas no pagadas, sobre todo si suponen desplazarse lejos del lugar de residencia o incluso mudarse. Que luego hablamos de meritocracia…
Y se formó la gozadera
¿Qué hacen las empresas para mantener(te en) este tinglado durante tanto tiempo? Prometerte –o, al menos, mantener la esperanza y no desmentir la posibilidad desde el principio– un contrato después de la beca. Pero cuando llega la hora de hablar con tu jefe para firmar el ansiado contrato, vaya, es que las cosas no van bien y no podemos hacerte un contrato (a Julio le pasó). Es una relación tóxica, porque muchos confían en que te vuelques en el trabajo a cambio de una promesa que rara vez se cumple (pausa para recordatorio: no vas a heredar la empresa).
Existen compañías que viven de tener una rotación altísima de becarios ocupando puestos que deberían desarrollar trabajadores. En esto la ley es clara: los becarios no pueden sustituir a puestos de trabajo. Sin embargo, muchas empresas son auténticas “cárnicas”: picadoras de becarios. A veces, incluso las propias universidades, que además de consentir todo esto, son pésimas empleadoras. Dentro anécdota: cuando Julio fue becario un par de meses en su universidad, tuvo que rellenar sus propios datos y calcular sus cotizaciones en una hoja de Excel. Era eso o no cobrar…
Menos mal que llega un momento en el que se acaba lo de ser becario, ¿verdad? ¿VERDAD? Pues no, porque incluso cuando no te quedan horas, incluso cuando ya has terminado tu formación, se hacen trampas. La principal: obligarte a hacer un cursillo solo para ampliar tus horas de prácticas (a veces te lo pagan, a veces no). Así aparece muchas veces en las ofertas anunciado. Sin discreción ni disimulo. Algunas de ellas en asociaciones y colegios profesionales. Si es que parece que toda la sociedad promueve la precariedad…
Pero todo esto se va a acabar con el nuevo estatuto del becario, ¿cierto? Dejando de lado que una ley no es ley hasta que no sale en el BOE, las mejoras que se contemplan –insistimos, aún no está aprobado– incluyen la cotización para el paro y establecer algún tipo de compensación económica por los gastos que suponen las prácticas, pero en ningún caso se habla de un salario mínimo. Estaremos pendientes del BOE.
Tenemos mil anécdotas de nuestras prácticas. Los periodistas somos unos quejicas. Pero como no queríamos monopolizar con anécdotas del sector, nos las dejamos para el Discord, donde esperamos que nos contéis también las de otros sectores. Igual nos da para un monográfico.
El curetaje de FAQAdulting
Gestionar la compra, preparar los tápers de la semana y ordenar la cocina es muy adulting. Aquí tenéis consejos sobre cómo organizar los alimentos del frigorífico, cuánto tiempo puede estar el guiso sin que se ponga malo o algunas explicaciones a leyendas urbanas sobre nuestra comida. Y aquí un hilo colaborativo sobre recetas veganas veraniegas.
¿Estás en una relación poliamorosa? ¿No sabes de lo que te hablamos y te suena a enfermedad del siglo XIX? Seas quien seas, este reportaje te interesa: según los últimos estudios, uno de cada cinco adultos ha tenido una relación poliamorosa a lo largo de su vida.
Hablando del siglo XIX, una recomendación literaria: esclavitud, racismo y un sistema machista mezclado con viajes en el tiempo de una californiana de los 70 hacia una plantación sureña de 150 años atrás. ¿Te mola la premisa? Pues, tenéis que leer Parentesco, de Octavia Butler (Capitán Swing no nos ha pagado por el patrocinio, pero si nos quieren mandar libros, somos muy fans de la editorial *guiño guiño*). Eso sí: advertimos de que es un libro duro y con un ritmo muy intenso.
Cada vez que nos llega una notificación de corazoncito, nos escribimos emocionados de que os guste lo que hacemos. Haz feliz a dos plumillas y déjanos tu like :)